El Centro Natación Helios hizo realidad su sueño de tener su primera piscina y el 4 de agosto de 1935, diez años después de la fundación del centro, se inauguró con una gran fiesta deportiva la piscina de 33 metros, con trampolín. Construida gracias a las aportaciones de los socios se convirtió en uno de los signos de identidad.

En septiembre de 1945, diez años después del estreno de la instalación, se celebró el Campeonato de España absoluto de Natación.

Sus características gradas, presentes hasta la última remodelación, le dieron nombre y acogieron multitud de público en las diversas competiciones que a lo largo de los años aquí se celebraron, como el partido de waterpolo que disputó la selección española masculina (campeona olímpica en Atlanta’96) contra Rumanía con motivo del 75 aniversario de Helios.

Entre los jugadores más destacados de la selección española de waterpolo que participaron en dicho partido  se encontraba el capitán del equipo Manuel Estiarte, considerado uno de los mejores jugadores de la historia del waterpolo mundial y Joan Jané, olímpico en su etapa como jugador y entrenador,  medallista  en mundiales y olimpiadas con la selección española masculina y de la selección china femenina,  el cual vinculo su carrera deportiva al Centro Natación Helios en la época dorada de la sección de waterpolo.

Durante la temporada de verano, esta piscina se convierte en un lugar de encuentro para socios y visitantes, ofreciendo un ambiente relajado y familiar. Además de la piscina de 33 metros, la zona cuenta con otras instalaciones, como la piscina infantil «La Seta», diseñada para los más pequeños, y amplias áreas verdes que invitan al descanso y al disfrute al aire libre

A nivel ornamental, la piscina de Helios cuenta con un reloj de sol siendo es uno de los elementos más emblemáticos y distintivos de la instalación. Ubicado en la parte central de los arcos que decoran el espacio, este reloj no solo cumple una función práctica, sino que también aporta un profundo significado simbólico.

La frase inscrita en el reloj, “Omnes Vulnerant, Ultima Necat” de origen latino, se traduce como “Todas hieren, la última mata”.

Esta expresión alude al paso implacable del tiempo, recordándonos que cada hora deja su marca en nuestras vidas, y que eventualmente la última será definitiva. Este mensaje convierte al reloj en un recordatorio constante de la fugacidad de la vida y la importancia de aprovechar cada momento.

Su ubicación estratégica en el centro de los arcos no solo lo hace altamente visible, sino que también refuerza su carácter simbólico como un elemento central de la piscina.

A lo largo de los años, el reloj se ha mantenido como un símbolo perdurable de la historia del Club Helios. Representa no solo el pasado y la evolución del club, sino también la conexión con tradiciones clásicas como la medición del tiempo a través de la luz solar. Es un testimonio de la visión de quienes impulsaron la construcción de la piscina y su deseo de combinar funcionalidad con significado.

Este reloj es mucho más que un accesorio decorativo; es una pieza que conecta el deporte, la cultura y la reflexión sobre el tiempo, consolidándose como un ícono que acompaña a los socios y visitantes en cada visita a la histórica piscina.